Cómo funciona el IVA en México | Impuestos en México

En este artículo, desentrañaremos cómo opera el IVA en México y qué implica para tu negocio o empresa.

En México, al tener un negocio o empresa, te encuentras con varios tipos de impuestos, siendo los más comunes el Impuesto sobre la Renta (ISR) y el IVA. Nos enfocaremos en el IVA, un impuesto indirecto que afecta tus operaciones diarias.

Este impuesto, que inició en 1978 bajo la presidencia de José López Portillo, se ha convertido en una fuente vital de ingresos para el país, junto con el ISR y los ingresos petroleros. El IVA, como impuesto al consumo, se paga al adquirir un producto o servicio. Cuando se estableció, la tasa era del 10%, pero en 2023, ha aumentado al 16%.

Tasas y Estímulos Fiscales

Es importante saber que en zonas fronterizas, existe un estímulo fiscal del 8%, tanto en la frontera norte como en la frontera sur. Para determinar si tu negocio califica para este beneficio, debes verificar si te encuentras dentro de los municipios autorizados. Un consejo clave: para aplicar este estímulo, debes presentar un aviso en el portal del Servicio de Administración Tributaria (SAT) dentro del mes siguiente al inicio de tus operaciones.

Además de la tasa general del 16%, existen otras tasas, como el 0% y la exención. La tasa del 16% es la más común en productos y servicios. Por ejemplo, restaurantes, prendas de vestir, servicios de telefonía, y negocios como bufetes de abogados, estudios de diseño y talleres mecánicos se rigen por esta tasa.

0%, Exento y Sus Diferencias

El 0% se aplica a productos como alimentos no procesados, medicamentos, joyería, libros, revistas, chicles y gomas de mascar. En cuanto a servicios, abarca actividades agrícolas, ganaderas, sacrificio de ganado, aves e invernaderos.

Por otro lado, ciertas actividades, como la venta de casas y terrenos, servicios de enseñanza y transporte público terrestre, están exentas del IVA. La diferencia crucial radica en que quienes aplican el 0% están obligados a presentar declaraciones de IVA, pero a una tasa del 0%, lo que les permite solicitar devoluciones. En cambio, aquellos que se dedican a actividades exentas no tienen esta obligación ni pueden solicitar saldos a favor. Es importante recordar que estas dos categorías tienen tratamientos fiscales diferentes.

El IVA en Tu Negocio

Si ya tienes registrado tu negocio en el SAT, debes incorporar el IVA en tus precios de venta. Es crucial evitar la práctica de cobrar el IVA por separado según la forma de pago o si el cliente solicita factura o no. El SAT considera un 16% de todos tus ingresos, independientemente de la forma de pago.

Para garantizar que tu negocio sea rentable, es esencial calcular cuidadosamente tus costos, gastos y los impuestos correspondientes antes de fijar tus precios de venta.

IVA Trasladado y Acreditable

Tanto tú como tus proveedores aplican el IVA en sus transacciones. El que cobras a tus clientes se conoce como IVA trasladado, mientras que el que pagas a tus proveedores es el IVA acreditable. Al comprar, asegúrate de solicitar una factura detallada que desglose los productos o servicios adquiridos y los impuestos correspondientes. Esta factura no solo te ayuda a rastrear tus compras, sino que también puede reducir tus impuestos.

La Cadena del IVA

El IVA es un impuesto al consumo, lo que significa que lo pagan las personas que adquieren productos o servicios. Tus clientes te pagan a ti y, a su vez, tú lo pagas a tus proveedores. Siempre debes liquidar la diferencia al SAT al final del mes.

Ejemplo Práctico

Imagina que deseas vender sabanas por 200 pesos. El precio final para tu cliente sería de 232 pesos, incluyendo el IVA. Si tu proveedor te vende el mismo producto por 100 pesos más IVA y te emite una factura, estos 16 pesos del IVA acreditable pueden reducir tu obligación tributaria a 16 pesos.

Consideraciones Especiales

Si tus ingresos son del 0%, como podría ser en la venta de plantas, no debes agregar un 16% adicional. Tus proveedores aplicarán el IVA a sus ventas, pero este IVA acreditable podría generarte un saldo a favor, que puedes solicitar en devolución. Sin embargo, ten en cuenta que este proceso puede ser laborioso y llevar aproximadamente 40 días.

Conclusión

En resumen, el IVA es un impuesto fundamental para tu negocio que requiere atención mensual. Si sientes que estás pagando demasiado, revisa tus costos y tú administración, ya que no existen estrategias fiscales para reducir este impuesto. Recuerda, un negocio exitoso es aquel que opera de manera eficiente y cumple con sus obligaciones fiscales.